Si tienes un gato como mascota y te diagnostican alergia, te recomendarán que te deshagas de él, lo que te provocará un gran disgusto, ya que es una decisión muy difícil de tomar por el cariño que se les coge. Pero tu salud es lo primero.
Los gatos se encuentran entre las mascotas que más provocan alergias, casi el doble que los perros. Además, los gatos machos producen más alergias que las hembras. Los síntomas más comunes de la alergia a los gatos son: tos, estornudos, hinchazón, enrojecimiento, dolor de garganta, congestión nasal, etc… También se pueden dar síntomas como el asma, pitidos al respirar y erupciones cutáneas.
Existe la creencia de que el pelo es el causante de la alergia a estos animales, pero nada más lejos de la realidad. Grupos de investigadores han estudiado las proteínas que se hallan en las partículas de la piel de gato, conocidas como caspa de gato, que son la causa más común de la alergia.
Los gatos, durante su aseo, se impregnan por todo su pelaje, a través de saliva seca que es rica en secreciones, con el alérgeno, que acaba incorporándose al ambiente y es detectado por el sistema inmune del cuerpo, produciendo esos síntomas.
Pero has de saber que no todo está perdido
Antes de que tomes esa dura decisión, debes conocer que existen algunas recomendaciones para sobrellevar la alergia sin decir adiós a tu mascota:
-Evita las alfombras. Son lugares fáciles de quedar impregnados de la caspa de gato. Si las tienes en tu casa, las debes limpiar al vapor cada 2 ó 3 meses.
-No dejes que entre en tu dormitorio. Los colchones, edredones, colchas y sábanas atraen alégenos.
-Trata de usar cubiertas antialérgicas lavables o plástico para cubrir la cama y el sofá, es un tacto que no gusta nada a los gatos y evitará que vuelvan a subirse.
-Lava la ropa de cama a temperatura superior a 40 grados.
-Mantén las ventanas abiertas durante el mayor tiempo posible a fin de evitar la salida de los alérgenos y facilitar la circulación de aire fresco y nuevo.
-Procura tener sofás de fácil limpieza que puedas lavar periódicamente
-Baña al gato y cepilla su pelo frecuentemente. Esto ayudará a reducir los síntomas de la alergia.
-Usa loción hidratante, un spray que podrás adquirir en las clínicas y tiendas especializadas en mascotas.
-Utiliza purificadores del aire. Disminuyen muchísimo la presencia del alérgeno en el ambiente.
-Consulta con tu médico la posibilidad de vacunarte, ya que existen tratamientos específicos y eficaces.
Son tan lindos…